La Terapia Asistida con Animales consiste en la realización de una intervención en la que, un animal es incorporado como parte del tratamiento, con el objetivo de promover la mejoría en las funciones físicas, sociales, emocionales y cognitivas de los pacientes. Es fundamental adaptarlas a las necesidades de los usuarios, estableciendo objetivos específicos para cada caso.

La mayoría de los animales utilizados son perros y gatos con unas características específicas y adiestrados, que pasan a convertirse así en ayudantes o “co-terapeutas”. Pero también existen otros animales, como los caballos, aves rapaces y delfines, entre otros, que poseen cualidades increíbles para mejorar la adherencia al tratamiento terapéutico o rehabilitador.

Las investigaciones más recientes demuestran que la presencia y contacto de los residentes con los animales se asocia a sensaciones de tranquilidad y relajación así como reducción del ritmo cardíaco o de la presión sanguínea.

¿Cuáles son los principales beneficios de la «TAA »?

La terapia con animales tiene varios objetivos, tanto en el área de rehabilitación como en el aprendizaje, ya que es útil a nivel psicológico, cognitivo o psicomotriz, y ayuda a mejorar la comunicación, teniendo un efecto beneficioso en la socialización de los pacientes.

Los objetivos van dirigidos, principalmente a:

  • Potenciar las habilidades de comunicación y de relación personal.
  • Mejorar la autoestima y la autonomía.
  • Estimular para realizar actividades motrices.
  • Mejorar las relaciones y habilidades sociales.
  • Reducir los estados de ansiedad y depresión.
  • Fomentar el sentido de la responsabilidad.

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